La cena del 13 de junio fué coles de bruselas.
Ya sabía yo que me iban a gustar, es decir, uno las ve y son como repollos lechugientos en version bite size y la verdad no entiendo como tienen tan mala reputación. A mi me gusta el repollo y la lechuga, entonces empezamos bien. Ahora si el asunto es como con la suceptibilidad al sabor del brócoli a la cual yo soy autósomica dominante y por tanto no la siento pues nada no iba a sentir el horroroso sabor del que muchos se quejan. Yo creo que la mayoría de los casos el asunto de que algo no sea apetitoso es mitad presentación y mitad lo que dice mi mamá «Es que está mal preparado y asi todo sabe feo».
Asi fué como me las prepararon:
Frescas o congelas se escogen las de tamaño pequeño o mediano. Las mas grandes no son tan ricas. -no se porque- se añade ajo, sal, pimienta y aceite de oliva a fuego medio y luego se sube un poco el fuego para saltear, par de gotas de limón al servirlas y listo.
A mi me gustaron. -todo lo que he probado con ajo me gusta-
martes, 26 de julio de 2011
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